Uso de la marca de la empresa para impulsar la contratación
La marca del empleador se basa en el simple hecho de que toda empresa tiene una imagen. Ya que esta imagen se forma por todo lo que dices en el ámbito público, puedes influir activamente en su aspecto. En última instancia, si una compañía es considerada como una empresa atractiva, ganará los mejores candidatos, por lo que es vital que el mundo sepa que su empresa es exactamente eso. Pero, ¿cómo?
¿Cuál es nuestro único punto de venta?
En primer lugar, la búsqueda de la marca de empresa se basa sobre todo en la actitud. Se trata de los valores, cualidades y características que se ponen en valor en su negocio y que se comunican externamente. Llevar a cabo un autoanálisis es, por lo tanto, el primer y fundamental paso en el employer Branding. ¿Cuáles son nuestros puntos fuertes como empresa? ¿Qué ofrecemos a nuestro personal? ¿Qué nos hace especiales? Pero también, ¿cuáles son nuestras debilidades y cómo nos ven los de fuera?
Es crucial ser honesto consigo mismo. Los valores deben ser implementados, las promesas deben ser realistas. Teniendo esto en cuenta, debe hacer uso de los hechos, cifras y datos disponibles e incorporar a su autoanálisis a importantes partes interesadas como los altos ejecutivos, el personal de recursos humanos y los expertos en marketing. Si hace todo eso, terminará con una imagen matizada y basada en hechos de su propia empresa. Es posible que tenga que modificar algunas cosas para ser más competitivo como empresa, lo cual también forma parte de la imagen de marca de empresa.
Definición de los grupos objetivo
En la siguiente etapa, las preguntas clave de su campaña son "¿Cómo desea ser percibido como empresa?" y "¿Qué va a definir su marca de empresa?". Sin embargo, es igualmente importante preguntarse quién es su grupo objetivo y a qué candidatos quiere llegar. Cuanto más claras sean sus respuestas a estas preguntas, más probabilidades tendrá de tener éxito en su empresa. Llegar a los especialistas en TI requiere un enfoque diferente al de la contratación de personal de hostelería o de atención médica. En otras palabras, la forma de lanzar su campaña también depende de su público objetivo.
Muchos canales, un gran impacto
La marca de empresa suele ser una actividad multicanal. Las posibilidades de utilizar una enorme gama de herramientas para dar forma a su imagen son prácticamente infinitas, pero es vital que siempre se comunique de forma consistente y en línea con sus objetivos estratégicos. En pocas palabras, necesitas hablar con una sola voz. Existen innumerables canales a los que puedes recurrir, incluyendo sitios web de empresas y carreras, videos y eslóganes de empresas, eventos como jornadas de puertas abiertas, ferias de reclutamiento y visitas a universidades, rankings en portales como GlassDoor, formatos de medios tradicionales desde la televisión hasta la prensa, anuncios de trabajo en periódicos y, por supuesto, Social Media.
Los Social Media son los reyes
La única manera de llegar a los solicitantes de la generación Y o Z en particular es a través de los medios de comunicación social. Así que, si ese es tu público objetivo, asegúrate de usar Instagram, Snapchat y demás. Sin embargo, los solicitantes de mayor edad también se conectan en línea en busca de nuevas oportunidades, accediendo a portales profesionales como XING y LinkedIn, sin mencionar Facebook, Twitter y plataformas especializadas.
Regla No. 1: Perseverar
Es necesario tomarse el tiempo, regularmente y a largo plazo, para construir la marca de su empleador, y esto se aplica mucho más a los Social Media que a otros canales. Aprovecha todo lo que los Social Media tienen para ofrecer, desde anuncios pagados y consejos sobre eventos hasta encuestas, sorteos y concursos. Sobre todo, asegúrate de comunicarte con los usuarios, responderles, comentar sus publicaciones y darles algo parecido. Además de las oportunidades de trabajo específicas, también esperan ver historias que se relacionen con su empresa, pero que no necesariamente tienen que ver con una vacante en particular. Se trata de cultivar tu imagen: la marca de la empresa en su máxima expresión.
Por último, pero no menos importante, no olvide que la definición y el seguimiento de los indicadores clave de rendimiento son cruciales para medir y, cuando sea necesario, mejorar el éxito de los esfuerzos de marca de su empleador.