Compañeros de aprendizaje: Los formadores de hoy

Con la digitalización, las ofertas de aprendizaje en las empresas están cambiando, pasando de los cursos de formación tradicional a los conceptos contemporáneos de aprendizaje combinado. Esto también está cambiando el papel de los instructores: se convierten en guías de aprendizaje que apoyan a los empleados durante su formación.
27. Marzo 2020
3 min

Como todas las demás áreas de trabajo, la formación inicial y continua en la empresa está sujeta a adaptarse de acuerdo a los tiempos actuales. Los medios digitales han tenido una influencia especial en la cultura del aprendizaje: Si bien antes se consideraba que la enseñanza mixta era un concepto que "sólo" proporcionaba las cualificaciones básicas para formarse fuera del trabajo, como talleres o seminarios, hoy en día desempeña un papel central en el aprendizaje empresarial.

El aprendizaje - un proceso continuo

El trabajo y el aprendizaje se han unido cada vez más en los últimos años. Una de las razones de ello es que los ciclos en los que cambian las necesidades formativas son cada vez más cortos. Los fabricantes de software, por ejemplo, ahora actualizan sus aplicaciones informáticas cada cuatro o seis semanas. Además, el marco reglamentario, por ejemplo en la industria farmacéutica, está en constante evolución y los empleados deben recibir una formación demostrable para los nuevos requisitos legales.

Para mantener este ritmo y adaptar la transferencia de conocimientos a las necesidades individuales de los empleados, el aprendizaje debe entenderse como un proceso continuo. Por consiguiente, los conceptos modernos de aprendizaje mixto combinan la formación en el aula con la formación basada en la web, las reuniones virtuales y las fases de aprendizaje autoorganizado. Lo ideal sería que también ofrecieran un intercambio comunitario y apoyo al rendimiento cerca del lugar de trabajo. Esto también cambia el papel del formador.

De "Push" a "Pull"

En el pasado, a los formadores se les encomendaba principalmente la aplicación de medidas de formación continua que tenían lugar fuera del lugar de trabajo. Por regla general, el departamento de formación definía el contenido, los tiempos y los objetivos de estas medidas y en consecuencia, se enseñaba a todos los participantes los mismos contenidos. En este escenario los alumnos eran virtualmente pasivos, porque el aprendizaje se controlaba desde fuera (push).

Por otra parte, en el aprendizaje mixto moderno, un gran número de medidas diferentes se interrelacionan: ofertas dirigidas por el formador y basadas en los medios de comunicación, fases de aprendizaje organizado y fases de autoaprendizaje, aprendizaje formal e informal. Como resultado, la imagen de sí mismo también cambia: los formadores se convierten en compañeros de aprendizaje que vigilan todo el proceso. Apoyan a los alumnos en asociación y adaptan la oferta de aprendizaje a sus necesidades. En este escenario, los alumnos están activos y solicitan el contenido de aprendizaje según sea necesario (pull).

Nuevas competencias

Para cumplir esta función, los formadores necesitan un conjunto completo de habilidades: Las guías de aprendizaje de hoy en día construyen ofertas de aprendizaje, planifican rutas y diseñan medios de aprendizaje. Crean videos, podcasts o nuggets, supervisan comunidades y desarrollan formatos de aprendizaje virtual, y a su vez son responsables de asuntos estratégicos como el desarrollo de una nueva cultura de aprendizaje.

Newsletter

¡Regístrate ahora y no vuelvas a perderte un puesto!
Al introducir mi dirección de correo electrónico, doy mi consentimiento para el tratamiento de mis datos de acuerdo con la declaración de consentimiento.

Artículos relacionados